miércoles, 29 de febrero de 2012

Cuando Pollito conoció a Ratoncito

Pollito es bastante tímido. Cuando llega a un sitio o viene alguien a casa, aunque sea conocido, le da vergüenza y no habla hasta pasado un rato. Esto nos pasa incluso con la familia, aunque al poco rato se suelta y ya no hay quien lo haga callar, pero el primer momento está muy cortadillo.

Por eso, antes de nacer Ratoncito teníamos claro que el momento en que se conocieran Pollito y él tenía que ser íntimo, sólo nosotros 4 en la habitación. Ya nos imaginábamos que sería difícil estar solos, porque Pollito sólo podía venir a verlo al salir del cole y a esa hora empieza la hora punta de visitas. Pero es que su reacción no iba a ser la misma si estábamos solos o si había más gente en la habitación.

Encima el día del nacimiento de Ratoncito (17 de enero, San Antonio Abad) era fiesta en Vilanova, de donde es Papá Oso, así que tuvimos visitas desde el mediodía porque su hermano no trabajaba y pudieron venir antes.

Así que lo que hicimos fue que papi se lo explicó a su familia, que no se lo tomó mal (o al menos no dijeron nada, deben estar acostumbrados a nuestras rarezas...), fue a buscar a Pollito y cuando llegaron al hospital me llamó y yo "eché" a todo el mundo, se fueron al bar a tomar algo.

Fue genial, hicimos bien en hacerlo así. Pollito entró en la habitación y yo estaba tumbada en la cama con Ratoncito al lado. Casi ni me saludó, tenía prisa por conocer a su hermano!! Empezó a decirle "Hola Ratoncito!!", a mirarlo, a darle la manita para que le cogiera el dedo... se me caía la baba, estaba más emocionada!! Más tarde papi cogió al bebé y se fueron al sofá, y Pollito todo el rato mirando al bebé y diciéndole cositas, y mientras yo fotografiando el momento, tenemos una serie de fotos de ellos 3 chulísima... fue mucho mejor de lo que esperaba!!

lunes, 27 de febrero de 2012

Mi parto

Ya sé que ha pasado un tiempo (mañana hará 6 semanas), pero no quiero dejar de contarlo, que estas cosas luego se olvidan. No es que haya mucho que contar, fue tan rapidísimo... pero bueno, ahí va.

Aquí conté cómo fue la mañana que nació Ratoncito. Me faltaba la parte del paritorio. 

Pues bueno, llegué por urgencias mientras Papá Oso aparcaba y me mandaron para los paritorios. Allá que me fui, con un par de paradas por el camino porque me venían contracciones y no podía caminar. Me habían dicho que esperara en la puerta que ya saldría alguien, y eso hice. Unas cuantas contracciones después, allí no aparecía nadie. Las contracciones me dolían un montón ya, cada vez que me venía una me ponía en posiciones inverosímiles en un banco que había fuera para familiares. Llegó Papá Oso de aparcar y me vio allí. Intentó llamar a la puerta pero no salía nadie. Preguntó en el punto de información de allí al lado y le dijeron que ellos no podían avisar, que volviera a urgencias y preguntara allí. Y para allí que se fue... Debieron llamar o algo porque entonces se abrió la puerta y pude entrar, por fin!!! Luego me enteré que ese día tuvieron muchos partos, pero igualmente, esta parte la tendrían que mejorar, que estar con contracciones en medio de un pasillo, teniendo de público a los familiares de las demás parturientas, no es muy agradable.... 

Una vez dentro, me atendió Raquel. Un encanto, de verdad, súper dulce y cariñosa, no sé si todas son así o es que tuve mucha suerte!! Me dijeron que me desvistiera y eso hice, allí mismo. Cuando me vieron en pelotillas se rieron y me dijeron que la idea era que me desvistiera en el lavabo, y me dieron una bata para taparme un poco... La verdad es que yo no estaba para que me importara si me veian desnuda o no, ni se me había ocurrido que tenía que ir al lavabo, jajaja!!! 

Entonces Raquel me dijo que iba a mirar cómo estaba de dilatada. Y estaba 3 cm.... casi me muero!!! Porque mi idea era, si podía, parir sin epidural (ahora cuento por qué), aunque con mi poca resistencia al dolor no estaba segura de aguantar. 

Por qué no quería la epidural: el día que nació Pollito, yo tenía visita a las 8:30 en el hospital para correas. Las contracciones habían empezado cerca de las 6 de la mañana, así que fuimos para allí bastante pronto, pero porque teníamos visita, de hecho dudamos hasta de si nos llevábamos la maleta para el hospital, porque no me dolía mucho... la llevamos por si acaso, y menos mal!! Pues a las 8:30, cuando me miraron, ya estaba dilatada de 5 cm, y no me dolía demasiado. A las 10:30 ya me dolía bastante, y pedí la epidural. Nació a las 13:30, bastante rápido, y podría haberlo sido mucho más porque tuvo que ser con fórceps, porque yo no notaba cuando tenía que pujar, me lo tenían que ir diciendo pero se ve que no hacía suficiente fuerza y el niño no salía...

Para este parto no quería que mi niño tuviera que nacer con fórceps, por eso no quería epidural que me quitara la sensibilidad, y como el de Pollito lo había llevado tan bien, pues pensé que valía la pena intentarlo. Pero cuando me dijo que estaba de 3 cm, con lo que me dolía!!! Y si con Pollito con 5 cm me dolía mucho menos y tardó 5 horas en salir desde entonces, entonces cuánto me faltaba con Ratoncito??? Sí, el segundo parto dura menos, pero no me veía capaz de aguantar 2 ó 3 horas más con esos dolores, así que pedí (supliqué) la epi... me dio mucha pena pero es que no podía. 

Raquel me dijo que intentara aguantar un poco más, porque estaba de muy poquito, aún faltaba bastante, y se podía parar el parto si la poníamos ya. Yo pedí que aunque fuera sólo un poquito, que no podía... Así que me intentaron coger una vía. Yo estaba sudando a mares y cuando la ponían se despegaba el esparadrapo y se salía. Al final, después de salirse 3 veces, tuvieron que poner el esparadrapo enrollado al brazo para que no se moviera. A todo esto, Papá Oso no estaba aún, había ido a hacer el ingreso. Y yo empecé a pujar, aunque no me di ni cuenta, yo sólo tuve ganas de apretar y eso hice. Raquel me lo dijo, "estás empujando?" Me sorprendió un montón.  "No lo sé...", pero entonces me di cuenta de que sí, estaba empujando!!! Me pusieron la epidural pero me debieron poner poquísima porque no perdí la sensibilidad en ningún momento, de hecho me avisaron que estaba tan avanzada (nació 10 minutos después) que no daría tiempo a hacer todo el efecto, y es cierto, me quitó un poco el dolor pero no del todo, y las ganas de empujar seguían ahí, cada vez con más fuerza!!! 

Entonces entró Papá Oso, con el kit para la extracción de sangre del cordón... yo no me había acordado de avisarles de que queríamos guardarla, y no lo debieron leer en mi historia clínica (bueno, no sé si el gine que me visitó un mes antes lo había apuntado....) Total, que se pusieron a prepararlo todo a toda velocidad, me dijeron que aguantara un momento sin pujar para que les diera tiempo a prepararlo, y al poco, cuando ya lo tuvieron listo, unos empujoncillos más y sacaron a Ratoncito!!! Qué sorpresa me llevé!! Porque sí, yo había ido allí a parir, pero en medio de tanto dolor casi se me había olvidado que al final había premio, mi precioso bebé!!!

Luego nos dejaron allí 2 horitas solos los 3, piel con piel Ratoncito y yo, me lo pude poner al pecho enseguida y lo cogieron para pesarlo cuando yo les dije, fue genial, no cambiaría nada!! Bueno, quizás lo de la epi, ya sé que al entrar estaba aún muy poco dilatada y nadie podía saber que en 40 mintuos estaría el niño fuera, pero tendría que haber confiado más en mí misma, porque esos dolores tan fuertes no los llegué a notar nunca con Pollito, tenía que haberme imaginado que iba a ser veloz!! Pero bueno, salió todo bien, pude pujar yo solita y mi niño nació sin ayuda de fórceps que era lo que más miedo me daba, así que perfecto!!!

Yo, en mi casa justo antes de salir para el hospital. Menos de 2 horas después tenía a mi bebé en brazos. 


sábado, 25 de febrero de 2012

Mami, cuando yo sea grande tú serás mi novia!!!

Antes de acostarnos, cada noche papi o yo le contamos un cuento a Pollito. Luego apagamos la luz y, si estoy yo con él, le pregunto si quiere dormir ya o quiere contarme algo. Es una pregunta "trampa", jeje, porque él no quiere dormir aún y a mí me encanta que me cuente cositas. Así que me suele explicar qué ha hecho en el cole, con quien ha jugado hoy en el patio, o repasamos lo que ha hecho en el día o lo que haremos mañana.

Últimamente, no sé por qué, hablamos a veces de cuando él sea grande. De cuando sea un papá, decimos. No tanto en el sentido de tener hijos, sino más bien por entendernos en el rango de edad, que gente grande hay mucha, sus primas de 10 y 18 años, mi hermana de 26, mamá y papá con "taitantos", los yayos ya con 70...

Pues la otra noche me dijo: 
- Mami, cuando yo sea un papá me quedaré a vivir aquí contigo.
- Ah, sí? No vivirás con tu novia?
- No, yo viviré siempre aquí y tú serás mi novia.

Le expliqué que yo no podía ser su novia, porque yo ya tengo un novio que es papá y cuando él fuera un papá yo sería la yaya de sus hijitos. Además, él tiene ya una novia "fija" desde el verano pasado, que se dieron un beso en la boca y todo (de hecho creo que se han dado varios...), y esta nena me paró un día a la salida del cole para decirme que Pollito y ella se iban a casar, jajaja!! Y además de esta novia, tiene otras que van cambiando, y hace poco decía que él cuando fuera grande se casaría con su novia y con sus dos primas y vivirían los 4 juntos... ale, a montar un harén!!!

- Pero yo no quiero que tú seas yaya, yo quiero que seas mi novia... - Con voz de penita...
- Pero entonces, si yo soy tu novia, papi qué novia tendrá? Se quedará sin novia?
Y se quedó pensando un rato hasta que me dijo:
- Ya sé!! Tú serás mi novia y papi será el yayo de mis hijitos!! 

Ya sé que todos los niños pasan por una etapa de querer casarse con sus mamis, pero igualmente, qué mono él que me prefiere a cualquier otra chica!! Ya veremos cuando llegue a adolescente si sigue opinando lo mismo...

viernes, 24 de febrero de 2012

Cólicos

Ya he contado estos días que Ratoncito tiene cólicos. Pollito no tuvo, además es que no lloraba casi nunca y, si lo hacía, con ponerle a la teta ya se callaba. Así que tanto llanto nos ha pillado de novatos y sin saber cómo calmarlo, porque no sirve ni la teta, ni cogerlo en brazos. Buceando por internet hemos encontrado cosillas, alguna nos ha servido y otras no... ahí van: 

Cosas que NO nos han funcionado:

- El famoso colikind. Que supuestamente es homeopático pero en realidad no lo es tanto porque está compuesto básicamente de hinojo, manzanilla y tila (lo podéis ver aquí) Se lo dimos un par de veces y no notamos ningún efecto. Dice la pediatra que hay que dárselo varios días para notar algo, pero no lo hemos vuelto a probar.

- Mecerlo apoyado boca abajo en el brazo. Sólo una vez se ha dormido así, pero creo que ha sido por agotamiento de tanto llorar...

- Masajearle la barriguita o tumbarlo boca arriba y subirle las piernas un poco en dirección al pecho para que expulse gases. Gases sí que expulsa, sí, que se tira cada pedete... pero no deja de llorar.

- Cogerlo mucho en brazos durante el día. Lo hemos hecho desde el principio y aún así, desde su segundo día (aún en el hospital) tenemos marcha casi cada noche.

- Intentar calmarlo con la teta.

Cosas que SÍ nos han funcionado (al menos a veces):

- Leí que si los bebés toman demasiada leche "del principio", que tiene más lactosa, y no vacían bien el pecho para tomar la parte más grasa, pueden tener cólicos. 
Ratoncito sólo toma una teta cada vez (a diferencia de su hermano que tomaba una, la otra, repetía la primera y a veces también la segunda...), y come cada 2 ó 2.5 horas, así que cada teta se vacia cada 4 ó 5 horas, y yo iba cargadísima. Cuando estaba muy molesta intentaba que comiera un poco "a deshoras" para aliviarme, pero he dejado de hacerlo, porque él apenas tomaba y claro, lo poco que me vaciaba era leche del principio.

- Aquí dos cosas un poco contradictorias. La primera, procurar que el niño tenga un día tranquilo, no estimularlo demasiado. Con un hermano mayor en casa es un poco difícil, por no decir imposible, que el peque tenga la tarde tranquila. Pero algo que le estresa mucho es salir en el cochecito, llora mucho. Pero es que yo tengo que ir a buscar a Pollito al cole cada día, y hasta que no me apañe un poco mejor con un foulard que me han dejado pues tiene que ir en cochecito. Pero los fines de semana, si algún día no salimos, sí que parece que pasa la tarde más tranquilo.

- Y la otra que leí: estimularlo durante el día. Pero, ¿cómo se estimula a un bebé de 2 ó 3 semanas que a los 5 segundos de estar despierto se pone a llorar como un desesperado? Porque lo de los 5 segundos es literal, no es una frase hecha... Pues la respuesta es fácil (o no): no dejando que pasen esos 5 segundos. Eso quiere decir estar súper pendiente todo el rato, que cuando está durmiendo en brazos es fácil, pero cuando consigo que se duerma en algún otro sitio (cuna, cama, hamaquita...) pues me paso el rato yendo a mirarlo. Y en cuanto lo oigo hacer ruiditos lo cojo y me pongo a hablar con él, a pasearlo por la casa y enseñarle cositas, a moverle muñequitos delante de la cara para que él les pegue manotazos... Y parece que ha funcionado, no sé si por mis esfuerzos por distraerlo o porque ya es un poquito más maduro y es capaz de aguantar despierto sin llorar.

- El ruido blanco. O sea, el extractor de la cocina, o el secador de pelo, o la aspiradora... es increible cómo se calma, ya había visto vídeos de bebés que dejaban de llorar al momento en cuanto les ponías ese ruido y realmente es así, muchas veces (aunque no siempre) deja de llorar enseguida. El extractor de mi casa ha funcionado más en este último mes que en todo el año pasado. Y yo voy a acabar desgastando el suelo de la cocina, 7 pasos arriba, 7 pasos abajo...

- Y la que nos va mejor.... bailar!!! Al ritmo de la música, claro. Pero a Ratoncito no le sirve cualquier música, no. Nada de "Sol solet", ni "L'elefant", ni ninguna canción infantil. A este le va la marcha y se duerme con su madre cantando a voces canciones discotequeras, que he aprovechado para recuperar mis discos de hace 10 ó 15 años y duermo al niño al ritmo de Abba, Britney Spears o Ace of Base. Quién me lo iba a decir a mí a los 20 años, con la energía que tenía entonces y desperdicié en discotecas, con lo bien que me habría ido ahora!!! Su padre, que no comparte mis exquisitos gustos musicales, cree que el niño se duerme de aburrimiento. Yo creo que no, que en realidad le gusta. En cualquier caso, los dos opinamos que el niño tiene buen gusto musical, jajaja!!! 

Aquí dejo una canción de Ace of Base muy animada que escuchamos varias veces al día (es la primera del disco que tengo), y que a veces hemos bailado los 4, paseando en fila por toda la casa como si fuéramos borrachos en fin de año bailando la conga, y vociferando "C'est la vie, always 21"!!!




jueves, 23 de febrero de 2012

La visita a la pediatra

Qué manía con la teta cada 3 horas...


Como ya conté aquí, Ratoncito con dos semanas y poco empezó con moquitos. Se los contagió Pollito, que había pillado un gripazo. Aguantamos unos días, pero al ser tan chiquitín, al final lo llevé a la pediatra porque aunque eran sólo moquitos me daba un miedo terrible a que acabara siendo más grave y tener que ir al hospital, donde casi seguro que lo habrían dejado ingresado.

Le expliqué a la pediatra que Ratoncito tenía mocos y había estado un par de días que no podía casi mamar, tenía que estar dándole constantemente porque cuando se enganchaba a la teta no podía respirar y acaba dejándola al poco, pero claro, entonces enseguida tenía hambre otra vez, y así nos pasábamos el día. Además, le dije que lloraba mucho, durante el día no podía estar despierto sin estar llorando, y a la noche teníamos "fiesta" cada día, mínimo un par de horas pero hubo un día que estuvimos 3 ó 4.

Lo pesó y resultó que se estaba engordando muchísimo (creo que 46 gr al día, cuando debería engordarse entre 20 y 30). Diagnóstico (recordemos que yo iba por unos moquitos): cólicos. El niño lloraba, de día y de noche, porque tenía cólicos, y la culpa era mía por darle tanto de mamar (¿¿¡¡mande!!??), porque además se estaba engordando demasiado. Que le echara suero en la nariz y le aspirara los moquitos (lo que ya estaba haciendo), y que le diera de comer cada 3 horas, no antes. Y si entre medias tenía hambre, que le diera manzanilla. Y a la noche, colikind para los cólicos. Alucinada me quedé...

Porque a ver, no es por dármelas de nada, pero si una consigue llegar a los 3 años y medio de lactancia con su hijo, es evidente que se ha tenido que informar mucho. Porque la gran mayoría de los profesionales sanitarios no tienen ni idea de lactancia. Porque Pollito cuando nació salió del hospital con lactancia mixta gracias a las enfermeras que me insistieron en que tenía hambre y había que darle bibes hasta que subiera la leche, en casa estuvo con lactancia materna exclusiva hasta las 3 semanas, en que empezamos otra vez con mixta por indicación de su pediatra. Ahí fue cuando cayó en mis manos el libro de Carlos González "Un regalo para toda la vida", y quitamos los bibes (que al fin y al cabo a Pollito no le gustaban) y seguimos con nuestra lactancia feliz. Encontré foros de lactancia donde aprendí muchísimo, sobre lactancia y sobre bebés y sus comportamientos normales (que parece mentira que los pediatras, que ven taaaantos bebés al día, consideren patológicas cosas completamente normales, como que un bebé se despierte chorrocientas veces por la noche, o que quiera estar siempre en brazos, o que en su primer año prefiera la teta antes que la comida....) 

En fin, que me voy del tema. Que aluciné con lo de las 3 horas, y se lo dije, que si el niño tenía hambre no lo iba a dejar llorar, y que le estaba dando lactancia a demanda. Y ella me dijo que la lactancia a demanda estaba muy bien cuando no había problemas, pero que en mi caso no estaba indicada. También me dijo que no podía ser lo tener que estar meciéndolo para que se durmiera (ein???!!! Pero si tiene dos semanas, qué esperas???) Ahí también le dije que no lo iba a dejar llorar, para empezar por Ratoncito, no va estar llorando sin que nadie lo consuele, pero es que además hay otro niño en casa que tiene que dormir y con su hermano llorando no puede.

La verdad que salí muy decepcionada de la visita. Con Pollito empezamos a ir a esa pediatra cuando tenía un añito o así, y me encantaba, por todo en general, y en lo referente a la lactancia, aunque nunca le pregunté nada, siempre me ha felicitado por aguantar tanto (otros médicos te ponen una cara de susto cuando dices que un niño tan grande aún toma...), así que no me esperaba en absoluto que me diera indicaciones así. 

Evidentemente no le hice ni caso en lo de las 3 horas ni la manzanilla ni a dejar llorar al niño. Compramos el colikind (menudo atraco por unas bolitas...), se lo dimos un par de veces y no le hizo nada. En unos días dejó de llorar tanto de día, y a la noche parece que va mejorando poco a poco, sin necesidad de mirar el reloj para darle de comer ni de darle nada. Con los cólicos, lo que sirve es la paciencia, y algún truquillo más que nos ha ido bien y que ya contaré en otro post...


miércoles, 22 de febrero de 2012

Un mes (y pico) con Ratoncito

Mano de Ratoncito recién nacido
 
Ratoncito ya tiene un mes y 5 días! Quería hacer una entrada el día que cumplió un mes, pero es que es casi imposible que me pueda sentar a escribir, y hay tantas cosas que contar!! 

Las dos primeras semanas fueron bastante bien. Papi estuvo en casa con su permiso de paternidad, y Ratoncito estaba bastante tranquilo, se pasaba la mañana durmiendo. A veces hasta lo tenía que despertar porque llevaba 3 horas sin comer y me daba cosita. No es que se engordara poco, al contrario, pero es que además con tantas horas sin comer se me cargaba el pecho muchísimo. Yo podía dormir con él todo el tiempo que quisiera, sabiendo que además cuando me despertara la comida estaría hecha... qué lujo!!

A principios de febrero Pollito empezó con mocos. Y se los contagió a Ratoncito, que tenía entonces 2 semanas y 2 días. Al pobre le costaba un montón mamar, porque tenía la nariz tapada y no podía comer y respirar a la vez. Fueron unos días durillos, de pedir teta muchas veces pero estarse un par de minutos, y acabar enfadado y llorando. Esos días tuvimnos que ir a la pediatra, ya contaré la experiencia que tiene tela... 

El lunes 6 de febrero Pollito se despertó con fiebre. Era el primer día que Papá Oso volvía a trabajar después del permiso, así que tuve que quedarme sola con los dos. Fue bastante bien, pero al día siguiente a Pollito empezó a dolerle mucho el oído: tenía otitis. Ese día Papi se tuvo que quedar en casa conmigo, porque estaban los dos malitos llorando y no podía atenderles a la vez. El resto de la semana Pollito siguió con fiebre, con un gripazo como nunca, y yo lo pasé sola con los dos. Fue un estreno duro... yo solita, con un recién nacido medio malito y un niño grande, recién destronado, y enfermo también. Y eso que Pollito lleva genial lo de su hermanito, ni en mis mejores sueños me habría imaginado que iría todo tan bien, pero claro, también tiene sus ratos, y encima enfermo...La semana pasada Pollito ya pudo volver al cole, y desde entonces voy más tranquila.

Con 2-3 semanas Ratoncito empezó a llorar mucho. Pero mucho, mucho. De día era incapaz de estar despierto sin estar llorando. No lo consolaba ni la teta, ni los brazos, ni nada. Primero pensé que era por los moquitos, pero se le pasaron y seguía así. Me pasaba el día paseándolo por la casa para que se durmiera y no llorara. Agotador...

Además, tiene cólicos. Hago un inciso para decir que, cuando Pollito era un bebé y me leí los libros de Carlos González, en alguno de ellos decía algo así (hablo de memoria) como que los niños occidentales son los únicos que tienen cólicos, debido seguramente a que se les coge poco en brazos, porque en otras culturas donde los bebés no se separan de sus mamis esto no pasa. Pollito no tuvo cólicos, así que yo me lo creí. Pero Ratoncito... uf!! Y eso que, igual que su hermano, es un niño que está prácticamente todo el día en brazos, en los míos o en los de Papi, menos algún rato por la mañana que lo dejo durmiendo en la cama, el resto del día y de la noche está pegadito a mí. Pero aún así tiene cólicos, casi cada noche se pasa como mínimo 2 horas llorando, así que, o esa teoría no es buena, o somos la excepción que confirma la regla.

Desde este fin de semana Ratoncito ya no llora tanto (al menos de día). El jueves pasado, ya con casi un mesecito, estaba yo emocionada porque estuvo unos 10 ó 15 minutos despierto sin llorar!!! Incluso me dedicó alguna sonrisita. Y desde entonces, la cosa ha mejorado un montón!!! Ayer mismo estuvimos más de una hora "hablando", yo contándole cositas y él súper despierto y atento, riéndose de vez en cuando, me lo habría comido a besos!!! Y hoy lo he dejado en la hamaquita despierto un ratito y se ha portado genial, me ha dado tiempo a desayunar tranquilamente sin tener que estar meciendo la hamaquita con el pie o comer con él brazos y llenarlo de migas... un lujo!!! 

Y hasta aquí el resumen de su primer mes... de momento sobrevivimos, y mejor de lo que esperaba!!